DAVID LYNCH: EL DESVELO DE UN SURREALISTA
Daniel GonzálezNo cabe duda que, en muchos sentidos, Lynch gustaba de la excentricidad: su inconfundible corte de cabello —que incluso contaba con sus propios seguidores en Facebook e Instagram; su infaltable camisa blanca abotonada hasta el cuello, casi siempre acompañada de una chaqueta de riguroso negro; su renuencia permanente, y tantas veces incomprendida, a explicar la simbología conceptual de sus películas. También tenía fama de ser arisco, como Raúl Ruiz lo recordara en una entrevista al evocar sus días siendo compañeros en el jurado del Festival de Cannes de 2002.
ZOOARQUEOLOGÍA, UNA LARGA HISTORIA COMPARTIDA
Por:Carola Flores FernándezA través de la arqueología podemos descifrar lugares de encuentro entre animales y seres humanos y describir su contribución en la construcción de zoociedades y culturas, desafiando la antropocéntrica visión de la historia.